El polo se reinventa, y se convierte en el favorito de la temporada

Una prenda asociada a las épocas escolares, está dando un giro de regreso a nuestros guardarropas.

Si hay una prenda que grita "old money", es la remera polo. Ideada en la década de 1920 con la finalidad de convertirse en el uniforme para jugar tenis, el polo (también llamado "chomba") a pasado de ser una simple camiseta deportiva a un símbolo de estatus, y es una prenda básica que todos (hombres y mujeres) deberíamos tener.

Con la emergente tendencia de "Old Money", la cual busca imitar el estilo de vestimenta de aquellos individuos miembros de familias muy adineradas, era de esperarse el renacer de esta prenda, antiguamente relacionada a la uniformidad escolar. Hoy, la remera polo significa elegancia, sofisticación, y pertenencia a un grupo exclusivo de personas muy pudientes. Impone respeto y seriedad.

Pero como todas las tendencia, esta llega para arrasar con los cánones clásicos, para ofrecer una amplia variedad de siluetas, materiales y colores de remeras polo para poder adaptarse al estilo personal de cada uno de nosotros. Quedaron atrás los días en donde los polos parecían el uniforme del informático del barrio: los últimos diseños se llevan entallados, cortos y muy ajustados, o en su variante oversizes.

En los desfiles de moda masculina de la primavera de 2026, celebrados en junio, las polos se hiceron presentes más que nunca entre los invitados, como fue en el caso de Manu Ríos (a la izquierda, en el desfile de DIOR menswear) y Benito Skinner (a la derecha, en el desfile de Jacquemus).

En comparación con el apogeo de los polos en los años 90 y 2000, en donde las polos se caracterizaban por el color, las siluetas oversizes, y las clásicas rayas horizontales, la reinvención actual posee otro aire. Buscando una precisión creativa, se juega con textiles de muy buena calidad, que otorgan un acabado prolijo, una silueta entallada, y una caida natural.

Aunque mantienen su característico espíritu deportivo, los detalles, como mangas ensanchadas o tejidos transparentes, los convierten en una elección más sofisticada.

El espíritu dosmilero parece seguir vivo en las tendencias, sabiendo reinventarse y expresarse a través de diversas maneras, entendiendo los tiempos actuales, donde la perfección estética donde la mayor prioridad es la pulcritud está en un auge, obligando a las rebeldes modas Y2k a una modernización sofisticada.