Lindsay Lohan recrea los looks que vistió en Juego de Gemelas
- Daniel Rodríguez
- 30 jul
- 2 Min. de lectura
La actriz vuelve a la pantalla de Disney, y nos regala looks con un guiño nostálgico a Annie James y Hallie Parker.

La inolvidable actriz pelirroja de nuestra infancia está de regreso con su gira promocional de “Otro Viernes de Locos”, la secuela de la icónica película de Disney “Un Viernes de Loco”, coprotagonizada junto a Jamie Lee Curtis, su madre en la ficción.
El vestuario siempre fue un aspecto crucial en el desarrollo de los personajes de Lohan en sus películas. Desde el pasaje de chica nueva a popular de Cady en “Mean Girls”, o misma la rebelde Anna en “Un Viernes de Loco” refleja su cambio madurativo tras cambiar de cuerpos con su madre.
Pero si hay un personaje de Lohan que recordamos por sus looks es en su debut cinematográfico: “Juego de Gemelas”. En donde, encima, no solo nos ofrece un desarrollo estilístico, ¡sino dos! Al interpretar a la rebelde y aventurera Hallie, y a la vez a la sofisticada y elegante Annie.
Ambos personajes resultaron en looks icónicos, tan inolvidables que la misma Lindsay Lohan está recreandolos:
La actriz recreó uno de los looks más memorables de Hallie Parker: el clásico qipao chino rosado pálido. Ahora, optó por mantener el tono y la silueta, pero en este caso el diseño de Roberto Cavalli está cubierto por un bordado floral muy colorido con motivos orientales, con un acabado satinado.

Este es un vestido de tweed con el clásico patrón de tartán en color amarillo manteca, un tono que está muy en tendencia. Este diseño es perteneciente a la colección RESORT 2025 de Balmain, y lo combinan con zapatos de tiras de Jimmy Choo, un bolso Kelly de Hermés, joyas de Jessica McCormack, lentes de sol de Oliver Peoples, y, para coronar el look y terminar de cerrar las semejanzas, lo combina con una diadema a juego.

Este look también nos recuerda al conjunto de dos piezas de cuadros amarillos que Cher Horowitz, interpretada por Alicia Silverston vistió en la película Clueless (1995), terminando de completar en nosotros la nostalgia noventera.








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